martes, 2 de junio de 2009

Mujeres al Legislativo: Una oportunidad para la democracia

Por Líbana Nacif Heredia

Con la declaración universal de los derechos de hombre y del ciudadano, se inicia el lento camino hacia la construcción de la democracia. Para arribar a ella ha sido una condición necesaria la generación de espacios de poder en donde se de cabida a quienes representan los intereses de los diversos sectores de la sociedad.

El poder legislativo cuya finalidad es la elaboración y vigilancia del cumplimiento de las leyes que rigen la dinámica social, para su buen funcionamiento requiere de la integración representativa de todos los sectores donde su actuar tenga incidencia. Ante ello se hizo necesaria la generación de mecanismos de representación que a través de los partidos políticos permitan a dichos sectores acceder al poder legislativo mediante de los procesos electorales.

Así se crearon en México las cuotas de representación entorno a las llamadas acciones afirmativas, que reservan cierto porcentaje de candidaturas a mujeres, jóvenes e indígenas. Establecidas en el texto constitucional lo lógico es esperar de los partidos políticos y de la propia sociedad la configuración de un órgano legislativo que refleje la presencia de dichos sectores he incida en la elaboración y revisión de leyes para su beneficio, sin embargo hoy la realidad es otra.

Los círculos de poder formal a nivel federal le quedan debiendo a la representatividad y la integración actual del poder legislativo es una clara muestra de ello. En el caso concreto de la cámara de diputados, elemento central de la actual coyuntura política, la escasa presencia de las mujeres, es un hecho que incentiva la crítica e invita a la urgente reflexión sobre todo cuando nuestro estado de Guerrero no logró llevar a la cámara de diputados a una sola mujer a la actual legislatura federal que represente a este sector mayoritario de la población.

Si bien es cierto que la diputada Ruth Zavaleta Salgado es originaria de un municipio del estado de Guerrero, accede a la diputación por la vía plurinominal postulada en la lista de candidatos de partido presentada por el Distrito Federal donde ha desarrollado su labor política. Por lo que hoy por hoy el Congreso Federal en definitiva tiene una gran deuda con las mujeres de Guerrero.
La reflexión sobre este hecho implica diversos factores, habrá que analizar la eficacia del sistema de representación, la cantidad de mujeres postuladas en el proceso electoral de 2006, pero también reflexionar sobre la medida en que las candidaturas de mujeres representen una opción para el electorado, es decir, que tanto influye el hecho de ser mujer en la decisión del voto.
Las elecciones en puerta son una oportunidad de cobrar la deuda de las mujeres de Guerrero. En el caso del municipio de Acapulco en el que se disputan tres candidaturas femeninas sus plataformas deben ser consideradas como un llamado a los hombres y mujeres del municipio de que son parte importante del sistema político en la medida en que lograron ser postuladas por sus partidos luego de un proceso de selección interna en el hombres y mujeres aspiraron en igualdad de condiciones.

El llamado es a la reflexión hacia una mujer como opción política, aunque hay quienes en teoría prefieren omitir el criterio de género para otorgar el voto, lo cierto es que dicho criterio está presente en todo momento –talvez de manera inconciente- al no otorgárselo.

Los prejuicios por razón de género son una realidad y en algunos casos un factor determinante en el ámbito de la toma de decisiones políticas poro hoy que mujeres de Acapulco han logrado avanzar en esta toma de decisiones al lograr ser titulares de tres candidaturas, la oportunidad es para las demás mujeres del municipio, las electoras, para apoderarse de los espacios de la toma de decisiones a nivel nacional, permitiéndoles el acceso a la cámara de diputados.
Solo con la integración de un poder legislativo que represente a los diversos sectores de la población incluyendo a las mujeres se puede aspirar a una forma de gobierno democrático. Los beneficios de la representación política de las mujeres, dependerán de la organización de ellas mismas desde la sociedad civil para exigir resultados que abonen en su lucha, la lucha por el reconocimiento y la defensa de sus derechos.



Líbana Nacif Heredia

Líbana Nacif Heredia
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